Porque después de todo he comprobado
que no se goza bien de lo gozado
sino después de haberlo padecido.

Porque después de todo he comprendido
que lo que el árbol tiene de florido
vive de lo que tiene sepultado.

El pasado 16 de diciembre tuvimos la alegría y la bendición de compartir el acto de colación junto a nuestros queridos egresados. Estos 43 jóvenes, que nos acompañaron durante tantos años, recibieron sus diplomas y culminaron su trayecto en la educación secundaria, cerrando una etapa llena de recuerdos imborrables, aprendizajes significativos, y experiencias que marcarán sus vidas para siempre.

Iniciamos la jornada agradeciendo a nuestro Santo Padre y a nuestra patrona, Santa Teresita, por los dones y bendiciones que nos acompañaron en esta maravillosa aventura educativa. Posteriormente, nos reunimos en el aula magna de la Universidad Nacional de Cuyo para celebrar el acto de colación.

Queridos egresados, sepan que siempre tendrán un lugar en nuestra gran familia. Esto no es un adiós, sino un hasta luego. Confiamos en que Santa Teresita continuará iluminando y guiando sus pasos por el camino que, con esfuerzo y dedicación, hemos querido mostrarles.

Agradecemos profundamente a ustedes y a sus familias por la confianza y el acompañamiento a lo largo de estos años. Las puertas del Colegio siempre estarán abiertas para recibirlos, con el mismo cariño y compromiso de siempre.

Gracias por haber sido parte de nuestra historia ¡Qué Cristo y María los acompañen siempre!